Lisa




Estábamos en el norte o sur de un lugar; depende del sitio en el que te encuentres cuando leas esta historia.

 

Lisa me dio un algodón de azúcar, uno bien rosado; yo tenía una picazón de encías que parecía que cualquier cosa me calmaba esa sensación; hacía mucho frío, era invierno y la heladería estaba cerrada. Solo estábamos ella y yo.

 

Mientras yo comía con todas las manos melosas ese pedazo de nube Lisa buscaba algo que conocía, pero que había perdido. Buscaba palabras; no sabía como decirme que era su último día y que a partir de mañana ya no me iba a poder cuidar más.

 

Ella tenía a sus hijos y yo pronto me haría grande, me iría de la ciudad y no sabría que hacer con todo eso que tenía para mí. Quizás por eso tenía hijos, yo no podía pertenecer a su célula familiar, o ella a la mía, pensé.

 

Me agarró de la mano y me llevó a dar unas vueltas, jugamos en el subi – baja, hoy lo veo con ternura; ella me estaba mostrando que a veces estamos en la cima y otras veces podemos despertarnos algo más abajo que el asfalto.

Las piernas no me llegaban al piso todavía, así que yo no entendía de todas esas verdades.

 

Lisa tarareaba una canción que solo ella conocía, la tarareaba bajito, para sí misma, parecía que sus pensamientos no estaban ahí.

 

A mí nunca se me dio bien eso de la intuición, pero sé que Lisa pensaba que en el fondo de su corazón tenía que renunciar a mi cuidado y seguir adelante, porque sin falta llegaría mañana, pasado mañana y pronto la semana que viene. Y es verdad, la gente cuando ya no te necesita se va.

 

Me preparó la mochila, un jugo de naranja en cajita y una galletas de leche, apoyó su mano con un aroma tan peculiar que desapareció un día, no lo volví a oler.

 

Aunque recuerde esa época, no me funcionan los sentidos con esa parte de la infancia, quizás, reviva algunas cosas cuando cuide a alguien que se tenga que ir.

 

Pero hoy escribo sobre ella, porque aunque sea de recuerdos tengo algo para decir, algo que debería ser celebrado o perdonado.

 

 

 

 

Comentarios

Entradas más populares de este blog

Naná

Pretérito Imperfecto

Oportuno